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La mesa de comedor Nolix es la solución perfecta para quienes buscan funcionalidad y estilo en un solo mueble. Su diseño versátil se adapta tanto a cocinas pequeñas como a comedores de uso diario, convirtiéndola en una pieza indispensable en cualquier hogar. Gracias a su estructura abatible, esta mesa optimiza el espacio cuando no está en uso, plegándose de forma compacta para mayor comodidad.
El sistema de apertura mediante bisagras metálicas es resistente y fácil de accionar, permitiendo que los laterales se eleven de manera estable y segura. Esto transforma la mesa en alas funcionales que aumentan su capacidad de uso. Cuando está desplegada, la Nolix ofrece una amplia superficie ideal para disfrutar de comidas, reuniones o cualquier actividad cotidiana. Su diseño simétrico y líneas rectas la integran fácilmente en diferentes estilos de decoración, aportando orden y fluidez visual al ambiente.
Con unas dimensiones de Profundidad: 31-87-142 cm, Anchura: 77 cm y Altura: 78 cm, esta mesa se adapta a diversas configuraciones: puede estar completamente cerrada, con una sola ala abierta o totalmente extendida, brindando flexibilidad según las necesidades de espacio. En su posición plegada, actúa como una consola auxiliar que se puede ubicar en cualquier rincón. Fabricada en melamina de alta calidad y disponible en colores Blanco Artik-Roble Canadian, la Nolix es resistente, robusta y fácil de limpiar. Además, incluye tacos ABS anti ruido y anti rayado en las patas, garantizando durabilidad y comodidad al sentarse alrededor.
Las mesas de cocina son un elemento esencial en cualquier hogar, proporcionando un espacio funcional y acogedor para las comidas diarias y las reuniones familiares. Al buscar la mesa de cocina perfecta, es importante considerar varios factores que pueden influir en su precio y en su adecuación a tus necesidades específicas.
El material de la mesa es un aspecto crucial a tener en cuenta. Las mesas de cocina de madera maciza, como el roble o el arce, son populares por su durabilidad y estética atemporal, pero tienden a ser más costosas. Una opción más económica podría ser una mesa de madera laminada o MDF, que imita el aspecto de la madera natural a un precio más accesible, aunque puede no ofrecer la misma resistencia a largo plazo.
El tamaño de la mesa de cocina es otro factor importante que influye tanto en su función como en su costo. Una mesa más grande puede acomodar a más personas, lo cual es ideal si cuentas con un espacio amplio o recibes a menudo visitas. Sin embargo, si tu cocina es más pequeña, optar por una mesa compacta o extensible puede ser una solución práctica que también puede resultar en un menor costo inicial.
El diseño y estilo de la mesa contribuyen significativamente a las diferencias de precio. Mesas con diseños contemporáneos, líneas limpias y acabados pulidos pueden encajar perfectamente en cocinas modernas, mientras que los estilos rústicos y tradicionales ofrecen calidez y encanto. Los detalles decorativos y el trabajo artesanal elevan el precio de la mesa debido al esfuerzo y la habilidad involucrados en su creación.
El tipo de acabado aplicado a la mesa de cocina también es relevante. Un acabado resistente al agua y a las manchas protegerá mejor la superficie de la mesa, algo especialmente importante en un ambiente de cocina donde los derrames son comunes. Un acabado de alta calidad puede incrementar el costo, pero proporcionará una mayor longevidad y facilidad de mantenimiento.
La funcionalidad añadida, como cajones integrados o estantes inferiores, es un factor que también puede influir en el precio. Estas características adicionales pueden ofrecer un valor significativo al proporcionar espacio de almacenamiento adicional, aunque generalmente añaden al costo debido a la complejidad de su construcción.
La marca o el fabricante de la mesa puede afectar el precio. Las mesas de marcas reconocidas pueden ser más caras debido a la garantía de calidad y diseño que ofrecen. Aun así, explorar opciones de fabricantes menos conocidos podría brindarte buenas oportunidades de encontrar mesas de buena calidad a un precio más competitivo.
Teniendo en cuenta todos estos factores, podrás elegir una mesa de cocina que no solo complemente el estilo de tu hogar, sino que también se ajuste a tu presupuesto, asegurando un espacio funcional y estéticamente agradable para tu día a día.
Las maderas macizas como el roble, el arce o el nogal son altamente recomendadas para mesas de cocina debido a su durabilidad y resistencia al desgaste diario. Estas maderas no solo ofrecen una larga vida útil, sino que también aportan un toque de elegancia atemporal. Sin embargo, el coste de estas maderas puede ser más elevado en comparación con opciones como la madera laminada o MDF.
El tamaño de la mesa debe ser proporcional al espacio disponible en tu cocina. Para cocinas pequeñas, una mesa extensible o compacta puede ser ideal, ofreciendo flexibilidad según las necesidades. En espacios más amplios, una mesa más grande puede ser más conveniente, permitiendo acomodar a más personas durante reuniones o comidas familiares. Es importante medir el espacio antes de hacer una compra para asegurarse de que la mesa se ajuste perfectamente.
El acabado de una mesa de cocina no solo afecta su apariencia, sino también su funcionalidad y durabilidad. Un buen acabado resistente al agua y a las manchas es crucial para proteger la superficie de la mesa en un ambiente propenso a derrames como la cocina. Acabados de alta calidad pueden incrementar el costo, pero a la larga ofrecen un mejor rendimiento y facilidad de mantenimiento.
Las funcionalidades añadidas como cajones o estantes en las mesas de cocina pueden ofrecer un gran valor, especialmente en cocinas con espacio limitado para almacenamiento. Estos elementos ayudan a organizar mejor los utensilios de cocina y otros insumos, optimizando el espacio. Aunque el precio pueda ser más alto, la inversión puede justificarse por el beneficio adicional del almacenamiento integrado.