En un comedor con poca luz natural, los tonos terrosos pueden utilizarse hábilmente para hacer que el espacio parezca más luminoso y acogedor. Los tonos terrosos claros como el beige o el color arena son especialmente adecuados, ya que reflejan la luz existente y abren visualmente el espacio. Estos colores pueden usarse en las paredes o en forma de muebles y decoraciones.
La iluminación juega un papel crucial en una habitación con poca luz natural. Elige lámparas con luz cálida para crear un ambiente acogedor. Varias fuentes de luz, como lámparas de techo, lámparas de pie y lámparas de mesa, pueden ayudar a iluminar uniformemente el espacio y proporcionar un ambiente acogedor.
Los espejos también son útiles para hacer que el espacio parezca más luminoso. Colócalos de manera que reflejen la luz y amplíen visualmente el espacio. También las decoraciones en tonos terrosos claros, como plantas en macetas pequeñas o jarrones con flores secas, pueden aportar acentos naturales sin ocupar mucho espacio.
En general, los tonos terrosos en el comedor con poca luz natural deben usarse de manera armoniosa y discreta para crear un ambiente acogedor y acogedor que haga que el espacio parezca más luminoso y amigable.