Elegir el color correcto de las velas puede tener un gran impacto en la atmósfera de tu sala de estar. Los colores tienen la capacidad de influir en los estados de ánimo y evocar emociones. Por lo tanto, es importante seleccionar cuidadosamente los colores de tus velas para lograr el efecto deseado.
Comienza analizando la paleta de colores existente en tu sala de estar. ¿Qué colores dominan? ¿Hay ciertos colores de acento que deseas resaltar? Si tu sala de estar, por ejemplo, está decorada en tonos neutros, colores intensos como rojo, azul o verde como color de las velas pueden ofrecer un contraste vibrante. Estos colores atraen la atención y pueden servir como un punto destacado en una habitación de otro modo discreta.
Si tienes una sala de estar más colorida, puedes usar velas de colores para reflejar los colores existentes o crear un contraste deliberado. Tonos pastel como rosa, azul claro o verde menta pueden tener un efecto suave y relajante y se integran bien en un ambiente colorido.
Otro aspecto que debes considerar es la temporada. En primavera y verano, los colores claros y frescos como amarillo, naranja o turquesa son especialmente populares, mientras que en otoño e invierno, tonos más cálidos como burdeos, verde oscuro o dorado crean una atmósfera acogedora.
Además del color, también juegan un papel la forma y el tamaño de las velas. Velas grandes y robustas en colores intensos pueden servir como pieza central, mientras que velas más pequeñas y delicadas dispuestas en grupos forman una unidad armoniosa. Experimenta con diferentes combinaciones para encontrar el equilibrio perfecto para tu sala de estar.