Las decoraciones estacionales son una excelente manera de mantener tu alféizar interesante y variado durante todo el año. Cada estación ofrece sus propios colores, materiales y temas que puedes incorporar en tu decoración.
En primavera, puedes trabajar con flores frescas y accesorios en tonos pastel. Tulipanes, narcisos o jacintos en pequeños jarrones traen la primavera a tu hogar. Complementa las flores con elementos decorativos como pequeñas casitas de pájaros o mariposas de madera o papel.
El verano invita a establecer acentos marítimos. Conchas, arena y pequeños barcos pueden ser arreglados en el alféizar para crear una sensación de vacaciones. También, farolillos o linternas de colores encajan perfectamente en la decoración de verano.
En otoño dominan los colores cálidos como el naranja, rojo y marrón. Calabazas, castañas y hojas coloridas son elementos decorativos típicos que puedes colocar en tu alféizar. Velas de diferentes tamaños y formas crean una atmósfera acogedora.
Finalmente, el invierno ofrece la oportunidad de trabajar con guirnaldas de luces y accesorios navideños. Pequeños árboles de Navidad, copos de nieve y estrellas de madera o metal encajan perfectamente en la estación fría. Aquí también, las velas son imprescindibles para crear un ambiente cálido y acogedor.
Con decoraciones estacionales, puedes reinventar tu alféizar una y otra vez y adaptarlo a la estación correspondiente. Así, tu hogar se mantiene vivo y variado.