Los vinilos decorativos son versátiles y se pueden colocar en la mayoría de las superficies lisas y limpias. Sin embargo, hay algunas restricciones que debes tener en cuenta para asegurarte de que el vinilo se adhiera de manera óptima y luzca bien.
Lo mejor es que las paredes sean lisas, secas y limpias, libres de polvo, suciedad y grasa. Las paredes que han sido recién pintadas deben secarse al menos dos semanas antes de colocar un vinilo decorativo, para asegurarse de que la pintura esté completamente curada.
Las superficies texturizadas o rugosas, como paredes de yeso grueso o papel tapiz con patrones fuertes, pueden afectar la adhesión del vinilo. En tales casos, puede ser útil usar una pieza de prueba para verificar la adhesión antes de colocar todo el vinilo.
También se pueden colocar vinilos decorativos en azulejos, vidrio o metal, siempre que la superficie sea lisa y esté limpia. En ambientes húmedos, como baños, es aconsejable usar vinilos decorativos especiales resistentes al agua para asegurarse de que se adhieran bien y no se vean afectados por la humedad.
En resumen, los vinilos decorativos se adhieren bien a la mayoría de las superficies, siempre que sean lisas, limpias y secas. Si tienes dudas, siempre es una buena idea realizar una pequeña prueba de antemano.