En el estilo modernista se utilizan con frecuencia materiales como el metal, el vidrio, la madera y el cuero. Estos materiales contribuyen a la estética sencilla y elegante que caracteriza al estilo modernista. El metal se utiliza a menudo para marcos de muebles y elementos decorativos, ya que ofrece líneas claras y un toque industrial. El vidrio se emplea frecuentemente en mesas y estanterías para crear una atmósfera aireada y abierta. La madera, especialmente en su forma natural, aporta calidez y una atmósfera acogedora al espacio, sin perturbar la estética clara. El cuero se utiliza a menudo para muebles tapizados, ya que ofrece tanto confort como estilo. Estos materiales no solo son funcionales, sino también duraderos y fáciles de mantener, lo que los hace ideales para el estilo modernista.