La jardinería urbana ofrece numerosos beneficios, especialmente en entornos urbanos donde el acceso a grandes jardines o espacios verdes a menudo es limitado. Una de las mayores ventajas es la posibilidad de cultivar verduras frescas, hierbas y flores incluso en el espacio más pequeño. Esto no solo fomenta una alimentación saludable, sino también una vida más consciente. La jardinería urbana contribuye a mejorar la calidad del aire, ya que las plantas absorben dióxido de carbono y liberan oxígeno. Además, promueve la biodiversidad al crear hábitats para insectos y polinizadores. Otro beneficio es la mejora estética de balcones, terrazas y otros pequeños espacios exteriores, que se ven más vivos y acogedores gracias a las plantas. La jardinería urbana también puede ser una actividad relajante y que reduce el estrés, ayudándote a desarrollar una conexión más profunda con la naturaleza, incluso si vives en la ciudad.