Un comedor industrial se caracteriza por el uso de materiales robustos y a menudo sin tratar. Los materiales típicos son el metal, la madera y el hormigón. El metal se utiliza frecuentemente para las estructuras de las mesas, sillas y estanterías, ya que ofrece estabilidad y un aspecto industrial. La madera, especialmente en su forma cruda o reciclada, se utiliza a menudo para las superficies de las mesas y otros muebles, para aportar calidez y naturalidad al espacio. El hormigón puede emplearse tanto para suelos como para paredes, para resaltar el encanto rústico del estilo industrial. Estos materiales a menudo se dejan en su forma natural para preservar el carácter auténtico del estilo. También se puede utilizar vidrio como material para las superficies de las mesas o elementos decorativos, para darle un toque moderno al espacio. En general, se trata de encontrar un equilibrio entre los diferentes materiales para crear un comedor industrial armonioso y con estilo.