Este producto aún no tiene historial de precios.
No te pierdas nada y configura una alerta de precios ahora mismo.
¿Te gusta el precio?
Ir a la tienda¿Precio demasiado alto?
La puerta de jardín compuesta en color marrón es la solución ideal para quienes buscan un equilibrio entre estética y durabilidad. Con unas dimensiones de 90x180 cm, esta puerta está fabricada en WPC, un material compuesto de alta calidad que garantiza resistencia a la decoloración y deformación, asegurando su aspecto impecable a lo largo del tiempo.
El marco de la puerta está construido en acero galvanizado en caliente, lo que proporciona una robustez adicional y evita cualquier tipo de deformación. Esta característica es fundamental para mantener la integridad de la puerta, incluso en condiciones climáticas adversas. Además, el diseño incluye bisagras y cerraduras, tanto diurna como nocturna, junto con manillas y un cilindro perfilado, lo que asegura un cierre seguro y funcional.
La puerta es versátil, adecuada para usuarios diestros y zurdos, lo que la convierte en una opción práctica para cualquier hogar. Su acabado en marrón, junto con la opción de color negro, permite que se integre perfectamente en diversos estilos de jardín y exteriores. Para aquellos que buscan una solución completa, también están disponibles cercas compuestas a juego, lo que facilita la creación de un entorno armonioso y estéticamente agradable.
Optar por esta puerta de jardín compuesta es elegir un producto que combina calidad, funcionalidad y diseño, ideal para embellecer su espacio exterior.
Las vallas para jardín son elementos esenciales para definir y proteger tu espacio exterior. No solo cumplen una función práctica al delimitar áreas y ofrecer privacidad, sino que también pueden mejorar la estética de tu jardín.
Al buscar vallas para tu jardín, notarás que existen múltiples factores que afectan sus precios. El material es uno de los principales determinantes del costo. Las vallas de madera son populares por su apariencia natural y versatilidad, pero requieren un mantenimiento regular para resistir las inclemencias del tiempo. Las vallas de metal, como acero o aluminio, son más duraderas y requieren menos mantenimiento, aunque pueden ser más costosas inicialmente.
Otro tipo frecuente son las vallas de PVC o vinilo, que ofrecen resistencia al clima y a la humedad y suelen ser más económicas que las metálicas. Además, son ligeras y fáciles de instalar, lo que las hace una opción práctica si buscas algo con bajo mantenimiento.
El tamaño de la valla que elijas también influirá en el precio total. Considera tanto la altura como la longitud que necesitas para abarcar el área deseada. Vallas más altas proporcionan más privacidad y seguridad, pero pueden ser más caras debido al material adicional requerido.
El diseño es otro factor que afecta el costo. Las vallas con diseños ornamentales o detalles intrincados suelen tener precios más altos que las opciones más simples. Sin embargo, estos diseños pueden añadir un toque de elegancia y complementar el estilo de tu jardín.
La instalación es un aspecto que no debe pasarse por alto. Si decides contratar un servicio profesional para instalar la valla, esto sumará al costo total. No obstante, para aquellos que disfrutan del bricolaje, algunas vallas son fáciles de instalar y pueden reducir significativamente los gastos.
Finalmente, la marca y la calidad del producto desempeñan un papel importante en el precio. Las marcas reconocidas a menudo aseguran una mayor durabilidad y un mejor soporte postventa, pero esto puede reflejarse en un precio más alto.
Al elegir vallas para tu jardín, es importante sopesar estos factores para encontrar la opción que mejor se adapte a tus necesidades y presupuesto. Una valla adecuada no solo encajará en tu espacio, sino que también lo protegerá, proporcionará privacidad y realzará la apariencia de tu jardín.